El pasado fin de
semana 9 y 10 de marzo realizamos un
nuevo curso de iniciación a la ornitología, donde las aves acuáticas y
esteparias fueron las protagonistas. El fin de semana presagiaba lluvia y
viento y aunque no se equivocaron en las predicciones tuvimos suerte y
aprovechamos al máximo todos los momentos en que el tiempo nos dio tregua.
Tras la parte teórica,
en la que se dieron las pautas imprescindibles para la identificación de estos
grupos de aves, ya con los estómagos llenos, en los que algunos pudieron
degustar la “Parrillada Manchega” (Chorizo, morcilla y panceta hechas a la brasa)
nos fuimos en busca de las aves esteparias. La primera parada, donde alguna
participante estrenó su flamante telescopio, fue en una colonia de Cernícalos
primillas en la que observamos los
primeros contingentes llegados tras su viaje de África. Durante la ruta pudieron
ser identificadas las siguientes especies: Grajilla, Estornino negro,
Urraca, Corneja, Pinzón vulgar, Perdiz roja, Avefría europea, Abubilla, Aguilucho
lagunero, Gaviota sombría, Alcaraván, Triguero, Mochuelo, Paloma torcaz, Conejo
y Liebre.
En una de las lagunas
que encontramos durante la ruta, también pudimos ver: Flamenco común, Tarro
blanco y uno de los últimos bandos de Grullas del invierno que se cruzaron ante
nosotros. Un grupo de Avutardas se dejó
ver mientras se alimentaban, no pudiendo profundizar más sobre el terreno en busca de más
especies de estepas ante la amenaza de lluvia y el estado de los caminos.
La segunda jornada la
dedicamos exclusivamente a la práctica de lo aprendido y en previsión de posibles aguaceros, se
decidió ir a lugares donde nos pudiéramos resguardar.
Puntuales a las 9 a.m.
nos encontramos en el Centro de Interpretación de la Naturaleza El Humedal de Don Quijote de Pedro Muñoz
y comenzamos la jornada en la laguna del Pueblo. Aquí las especies acuáticas se
dejan ver cerca y se pueden reconocer
con facilidad. Sin prisas, pudimos identificar: Aguilucho lagunero, Tarro blanco, Ánade azulón, Ánade
friso, Cuchara común, Porrón común, Malvasía cabeciblanca, Zampullín común,
Zampullín cuellinegro, Gallineta común, Focha común, Gaviota reidora, Flamenco,
Pato colorado y Cigüeñuela común.
Las
Golondrinas comunes y Aviones comunes sobrevolaban la laguna capturando los escasos
insectos que se atrevían a salir,
al igual que el Mosquitero común que los perseguía entre la vegetación de la
que intermitentemente se dejaba oír el inconfundible canto del Ruiseñor
bastardo.
Desde el Cerro de las Nieves laguna del Pueblo
Malvasía cabeciblanca,Porrón europeo y Zampullín cuellinegro.
Golondrinas comunes descansando sobre los carrizos.
Avanzaba la mañana y decidimos cambiar de ubicación en busca de nuevas
especies para identificar.
Nos acercamos a la laguna de Alcahozo ,donde apenas paramos ya que las aves
se repetían. Durante el camino pudimos observar: Pito real, Tarabilla común, Triguero, Cogujada común,
Corneja, Busardo ratonero, Paloma torcaz y una pareja de liebres con carreras y
en comportamiento amoroso.
Llegamos a la laguna de Manjavacas y
el tiempo nos dio un respiro para poner
a prueba la identificación sonora. El Rascón
europeo, Pájaro moscón, Ruiseñor bastardo y Bigotudo se hicieron notar entre el espeso carrizal,
dejándose ver tímidamente este último. También se dejaron querer los Escribanos palustres, donde pudimos
apreciar las diferencias entre machos y hembras.
Mientras, un insistente Buitrón reclamaba desde el cielo con su vuelo
oscilante.
Llegaba la hora de la comida y decidimos dar buena cuenta del picnic que
llevábamos.
Desde los vehículos y de camino al
observatorio, los limícolas fueron los protagonistas: Correlimos común, Correlimos
menudo, Chorlitejo patinegro y Archibebe común.
Correlimos común
Archibebe común
Chorlitejo patinegro anillado y con bandera.
Una vez a resguardo, las especies que identificamos se repetían destacando como
novedad Avoceta, Aguja colinegra, Avefría europea y Gaviota sombría.
Durante la estancia en el observatorio una de las actividades que más llamó la atención fue la
práctica del “movilcoping” en la que los
alumnos probaron las posibilidades que ofrecen los móviles de última generación
para hacer fotografías mediante el telescopio. Con esta técnica no se consiguen
imágenes de gran calidad pero sí la suficiente para posteriormente identificar
y salir de dudas con algunas especies.
Aguja colinegra anillada y con bandera.
Como en el día anterior las esteparias no se dejaron ver,salimos en su búsqueda por el entorno de la laguna. Un bando de Ganga
ibérica saltó a nuestro paso y en un barbecho cercano más Gangas y varios
Sisones comunes se alimentaban.
Macho de Ganga ibérica.
Fuera de programa y alejándonos de las lagunas y estepas decidimos probar
suerte con el objetivo de sorprender a los participantes del curso con la
maravillosa visión del Búho real que,
afortunadamente, se encontraba en su territorio.
Como colofón, un grupo de Milanos negros en plena migración no quisieron
perder la ocasión de sobrevolar por encima de nuestras cabezas a modo de
despedida cuando casi dábamos por termina la jornada.
Quiero resaltar y agradecer el buen ambiente que se creó desde el principio entre todos los
participantes. El compañerismo y el buen humor fueron la tónica durante todo el
curso.
Con
grupos así da gusto trabajar y compartir conocimientos.